[:es]Música y danza, en el Teatro Gayarre – 29 enero 2017[:]

[:es]El domingo 29 de enero, en colaboración con la Escuela de Danza del Gobierno de Navarra, ofreceremos un monográfico de «Música y danza». Tendrá lugar a las 12 horas (4€, Teatro Gayarre). El programa, dirigido por J. Vicent Egea, consta del siguiente programa:

Desde tiempos remotos, la danza ha expresado las más profundas emociones humanas. El hombre primitivo la eligió como medio para comunicarse con lo “trascendente”, liberando así toda la gama de sentimientos que le sorprendían. Los movimientos rítmicos repetidos daban lugar a una emoción capaz de llegar al frenesí. Todas las grandes civilizaciones de la antigüedad se valieron de la danza para celebrar cada acontecimiento de la vida. Fue a partir del Renacimiento, con el florecimiento de las cortes y el humanismo, cuando la danza adquirió un nivel de complejidad mayor, con pasos y figuras por parejas que requerían un aprendizaje. El ballet se fue configurando con un componente teatral, con un desarrollo y duración propias. En el s. XVII en Francia, a través de Lully, se generaron tipos de ballets en los que la danza conseguía expresividad gracias a la acción dramática que intentaba expresar. Ya en el s. XIX, el ballet o danza clásica se transformó en algo completo en sí mismo, un drama danzado integrado por música, trama y acción. Es así como llegó a las puertas del s. XX.

Los orígenes de la danza española también se pierden en la antigüedad, con la generación de bailes asociados a un lugar concreto. Algunos ejemplos son los entretenimientos cortesanos de los califas árabes de Al-Andalus y las danzas teatrales de la época de los Reyes Católicos. En el s. XVI se desarrollaron diferentes danzas cortesanas como la zarabanda, la chacona, el pasacalle y la folía, y las danzas litúrgicas (los seises) que hoy día podemos ver en algunas catedrales (la de Pamplona es una de ellas). Como asegura Julio Costa Madriñán: Los bailes populares poco a poco ejercieron su influencia sobre la danza y a comienzos del s. XVII las formas españolas de baile se pusieron de moda entre los maestros europeos de danza y en los bailes aristocráticos. En el s. XVIII el bolero, derivado de las seguidillas, ocupaba la vanguardia de los bailes españoles de sociedad. Este tipo de danza cautivó a los coreógrafos de la época que utilizan cada vez más este material español. Entre las categorías de danza española moderna, está la escuela bolera o danza clásica española, que apareció como una estilización para el escenario de danzas regionales individuales. Esta escuela alcanzó su cénit a principios del s. XIX, con una técnica y terminología específica, además de su carácter orgulloso y sensual y el porte característico del torso, los brazos y la cabeza. En el s. XX fueAntonia Mercé “La Argentina”, quien bebió en las raíces del flamenco, el folclore y la escuela bolera, siendo la primera en bailar la música de los grandes compositores españoles como Granados, Albeniz o Manuel de Falla.

La Pamplonesa comienza 2017 con nuevos e interesantes proyectos. Este primer concierto en el Teatro Gayarre nos acerca al mundo de la danza en dos de sus vertientes: Danza Clásica y Danza Española. Y siguiendo su línea de colaboración con Instituciones Educativas Artísticas, esta vez lo hace con los alumnos y profesores de la Escuela de Danza de Navarra. Aunque no es la primera vez que lo hacen, sí es la primera en la que todo el programa del concierto está dedicado a este género. Es una gran oportunidad para que los futuros profesionales de la danza sientan la emoción de mostrar al público todo de lo que son capaces para expresar con sus movimientos. Hay que felicitarse por estar hoy aquí para disfrutar de este concierto tan especial y agradecérselo a todos los que lo han hecho posible.

Luis Mª San Martín Urabayen

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