NOTAS AL PROGRAMA

Como es tradición, y ya van 15 años, la festividad de S. Saturnino con La Pamplonesa tiene aroma de zarzuela. Por eso presenta una actuación dedicada a este género musical, aunque en esta ocasión de una forma un poco diferente. Por primera vez presenta un único título, La Gran Vía, en una versión semiescenificada para la que cuenta con la colaboración de la Escuela de Canto “Eugenia Echarren”y el Coro de Cámara “Aizaga”de Pamplona. Compuesta por los maestros Chueca y Valverde como una “revista lírico cómica, fantástico-callejera en un acto”, fue estrenada en el Teatro Felipe de Madrid el 2 de julio de 1886 y se mantuvo durante cuatro años más en el Teatro Apolo. Desde entonces ha aguantado el paso del tiempo sin perder su actualidad ni modernidad, con asuntos urbanísticos que ni entonces ni ahora son recibidos con amabilidad. A lo largo del relato, un paseante nos guía durante una noche mágica en la que, por un portentoso encantamiento, las calles, plazas y rincones del Madrid decimonónico cobran vida. Una obra para disfrutar de principio a fin y que comparar sus guiños con la actualidad ya es por cuenta de cada uno.

La estructura original es en un acto y cinco cuadros. Alcanzó tal fama, que hubo que actualizar algunos de ellos para que siempre estuviera al día. Es un exponente del género chico llevado al campo de la revista de actualidad, en la que se exponían con gracia y buen humor las preocupaciones sociales y políticas del momento. El libreto de Felipe Pérez y González retrata con habilidad y sátira las noticias del momento, mostrando en escena un gran desfile de tipos y situaciones cómicas de gran efecto. Todo sea por ver el nacimiento de esta vía principal en la ciudad de Madrid.